Como fotógrafos, nuestros negocios dependen de complacer a nuestros clientes. Son sus opiniones y recomendaciones las que hacen crecer nuestros incipientes negocios fotográficos. Hacemos todo lo posible para que nuestros clientes estén contentos, para captar cada momento y para asegurarnos de que las imágenes finales sean las que quieren compartir con los demás. Pero a veces los clientes te piden más de lo que puedes y debes darles.

Decir "no" es difícil. Muchas veces sentimos como si tuviéramos que caminar en puntas de pie cerca de nuestros clientes, nos preocupamos porque si les decimos que no podemos algo, tal vez nos dejan una mala reseña. Sin embargo, en la mayoría de las situaciones, hay una forma diplomática de decir que no sin perder clientes. Hemos recopilado nuestras sugerencias para ayudarte a combatir pedidos extraños, insistentes y, a veces, simplemente groseros que oímos todos los días. 

¿Me pueden hacer un descuento?

No es raro que los clientes prueben suerte y pidan un descuento. Es fácil sentir que estos clientes no valoran tu tiempo o tu talento, lo que puede resultar muy frustrante. Sin embargo, hay que recordar que la publicidad y la sociedad nos condicionan a buscar el mejor trato posible, es decir, el mejor servicio o producto al precio más bajo. La mayoría de estos clientes se han puesto en contacto contigo porque aprecian tu trabajo, simplemente intentan conseguirlo a mejor precio. Es algo que hacemos todos, ya sea en el supermercado, o con algún contratista, o al comprar ropa. El hecho de que tu cliente esté buscando un descuento en tus paquetes fotográficos no significa que no vaya a pagar el precio completo, la clave está en manejar su consulta de manera que todavía le haga sentirse valorado sin que tengas que hacerle un descuento. 

Si te encuentras en esta situación, puedes intentar decir algo como:
"Gracias por ponerse en contacto conmigo. En este momento no tengo ninguna promoción, pero a veces sí hay. Suelo anunciarlas a través de boletines de noticias. Si te suscribes para recibir mi boletín, serás de los primeros en enterarte si ofrezco una oferta en mis servicios."

Este método le permite dirigirse a ellos en el futuro a través de sus boletines de noticias por correo electrónico, y lo más probable es que igual te hagan una compra por el precio completo.

¿Puedes hacer la imagen en blanco y negro, pero dejar las flores azules?

A todos nos han pedido alguna vez que añadamos un truco visual a nuestras imágenes, ya sea el uso de colores selectivos o algo totalmente distinto. En primer lugar, mantén tu sitio web y tus redes sociales libres de imágenes que no reflejen tu estilo habitual; esto ayuda a reducir la probabilidad de que los clientes te pidan algo inusual. Si sigues enfrentándote a este problema, debes ser claro, firme y educado. 

Puedes intentar decir algo como:
"Gracias por la sugerencia. Lamentablemente, el ejemplo/solicitud que ha enviado no se ajusta a mi estilo. Por lo tanto, no puedo modificar mis imágenes para que coincidan". 

Puede que algunos clientes insistan, pero te recomendamos que te mantengas firme y no cedas. Cualquier imagen que edites puede acabar en Internet con tu nombre, y cada vez recibirás más solicitudes de este tipo. 

No tengo mucho presupuesto para mi evento benéfico, pero dará mucho que hablar, ¿me donarías parte tu tiempo?

Si la exposición pagara las facturas, todos seríamos ricos. Lamentablemente, el supermercado no acepta dólares de exposición, así que ¿por qué deberíamos hacerlo nosotros? Aunque es tentador dar esta respuesta cada vez que alguien te pide que fotografíes porque “podrás exponerte”, tendrás la reputación de ser un poco quisquilloso. A la mayoría nos gusta donar nuestro tiempo a una buena causa, y muchos fotógrafos respetados aceptan proyectos personales o benéficos que les ayudan a mantener un mejor equilibrio entre la vida laboral y la personal, o para ayudar de alguna manera a una causa que les apasiona. Sin embargo, no se puede decir que sí a todas las organizaciones benéficas que se presentan. La clave está en encontrar la manera de rechazarlas sin que parezca que no te importan y sin sentir que tienes que mentir sobre por qué no lo haces. 

Si ya tienes un par de organizaciones benéficas o sin ánimo de lucro con las que trabajas, puedes intentar decir:
"Dono varias sesiones al año a organizaciones benéficas o sin ánimo de lucro que me son muy queridas, por lo que mi calendario de voluntariado para este año ya está lleno".

A partir de aquí, puedes ofrecer una tarifa reducida (si es algo que te interesa hacer) o preguntar a los fotógrafos locales si alguno de ellos está dispuesto a aceptar el proyecto.

¿Puedes enviarme los archivos RAW?

No hace mucho, la mayoría del público en general ni siquiera sabía lo que era un archivo RAW. Ahora, gracias a Google, parece que todo el mundo sabe lo que es un RAW, y la gente está empezando a pedir los originales. No sabemos muy bien si es para poder editar las imágenes ellos mismos o porque apareció en alguna lista de revisión previa a la boda, pero para la mayoría de los fotógrafos es un pedido que no podemos satisfacer. Si proporcionas archivos RAW, corres el riesgo de que tus imágenes (y tu nombre) se publiquen en Internet con un aspecto completamente distinto al de tu estilo cuidadosamente elaborado. 

La forma más fácil de abordar este tema es decir:
"El proceso de edición es una parte esencial de mi estilo y mi arte. Una foto RAW (sin procesar) es más plana, menos saturada y más apagada de lo que tu iPhone o cámara te podrían ofrecer. Esto se debe a que incluso tu iPhone edita rápidamente tus imágenes por ti, añadiendo saturación y contraste. El archivo RAW contiene todos los datos en bruto para que yo mismo pueda realizar estas ediciones y crear el aspecto que ves en mi sitio web y en las fotos que has recibido. Los archivos RAW son esencialmente un trabajo incompleto, por lo que no puedo enviártelos. ¿Hay algo con lo que no estés satisfecho y que yo pueda arreglar por ti?".

La mayoría de las veces, el cliente solo quiere jugar con la imagen o hacer pequeños retoques. Si explicas amablemente qué es un archivo RAW, en qué se diferencia de la imagen final que te entregan y te ofreces a "arreglar" el problema, puedes evitar entregar tus fotos RAW.

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Trabajar con muchos clientes es un sueño: respetan tu tiempo y tu proceso, pero siempre hay algunos que intentan presionarte más de lo que estás dispuesto a hacer. Sea cual sea la situación, respirar hondo antes de responder puede ayudarte a responder de forma más amistosa y profesional.

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¿Buscas más formas de interactuar con tus clientes? Prueba leer nuestro blog Cómo conseguir más referencias en tu negocio de fotografía o prueba Nuestros mejores consejos: Consigue que tus clientes se relajen delante de la cámara.